Esta colección representa el destino común del viaje de dos personas por la innovación; es la síntesis de la amistad entre el Director Creativo de Gucci, Alessandro Michele, y el cantante y compositor británico, Harry Styles.
Alessandro Michele conoció a Harry Styles hace muchos años, justo cuando los dos comenzaban sus carreras en solitario: después de que Michele debutara como Director Creativo de Gucci y Styles publicara su primer álbum. En cuanto sus caminos se cruzaron, surgió una relación de intercambio y de constante transmisión artística, y la motivación de ir más allá.
Todas sus conversaciones a lo largo de estos años tienen un elemento común: la risa, expresada tanto por escrito como a través de un emoji. Además, la onomatopeya "hahaha" es también la combinación repetida de las iniciales de Harry y Alessandro. "HA HA HA" define a la perfección el intercambio creativo y las perspectivas que comparten. Su amistad queda patente en esta nueva colección, con diseños que llevan cosidos esta onomatopeya en la etiqueta y que reúne los elementos que reflejan sus trayectorias creativas y sus rasgos únicos.
En un divertido diálogo oral a través de tejidos atemporales y diseños de moda, se reflexiona sobre el simbolismo de la ropa para hombre. Los elementos de la sastrería tradicional inglesa se combinan con detalles románticos, como los botones de nácar. A través del estilo bohemio y el pop de los años 70 echan la vista atrás hacia la vestimenta de los caballeros. Los trajes, las chaquetas de denim desgastado, los pijamas estampados, las camisas bowling y las faldas escocesas plisadas se reinventan a través de la imaginación de los dos creativos, lo que da como resultado una nueva visión de la belleza, una en la que se pone fin a los códigos complejos y matizados para que los individuos puedan reflejar su estilo de forma espontánea.
Siguiendo los aspectos más personales del intercambio creativo que se presentan en Gucci HA HA HA, la colección se ha mostrado por primera vez en una presentación íntima en Cavalli e Nastri, una boutique vintage de Milán. Sobre un fondo con objetos de distintas décadas, los dos artistas han jugado con diseños históricos para crear una versión totalmente personal y compartida, no de cada uno de ellos, lo que destaca la sinceridad presente en las amistades verdaderas.
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