Un emblema instantáneo forjado por una llama, el asa curvo de bambú corona una bolsa de mano hecha de piel en 1947, lo que marca el camino de la Firma como una innovadora en artesanía.
Fue el fundador de la Firma, Guccio Gucci, con la ayuda de visionarios artesanos florentinos, quien decidió usar bambú ligero y duradero en el asa de una bolsa en la época de posguerra de Italia, en la que las materias primas tradicionales eran difíciles de conseguir. En una expansión de la experiencia artesanal de la Firma a mediados del siglo XX, se produjo un proceso muy intuitivo, pero técnico, para darle forma curva al tallo. La naturaleza elabora las asas de bambú que, posteriormente, son modificadas por el artesano de la Firma; es decir, ningún asa es igual a la otra. Primero, se elige la mejor pieza de bambú, luego se suaviza y se trabaja sobre una llama abierta para doblar el material. Una vez formada, el asa se recubre con varias capas de laca y, después, se hornea para lograr un acabado brillante de color café dorado y se coloca sobre una bolsa con costuras hechas por expertos que recuerda la forma de una montura de caballo. Tras su debut, la bolsa Bamboo se convirtió en un accesorio habitual entre las damas líderes de Hollywood y el jet set internacional, lo que consolidó el estado del estilo como un ícono innovador en todo el mundo. Hoy en día, el reconocido diseño de la Gucci Bamboo 1947 está en el corazón de las icónicas colecciones de bolsas de la Firma y representa cómo un instinto creativo impulsado por un profundo conocimiento ha llevado a Gucci a donde se encuentra hoy.
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Vínculo copiado en el portapapeles.